Tubos de acero inoxidable - Características

Los tubos de acero inoxidable son:

• Resistentes: debido a su composición de cromo, níquel y molibdeno, estos tubos presentan una resistencia muy elevada frente a la erosión y las altas temperaturas.
• Anticorrosivos: pueden conservarse libres de óxido durante años, independientemente del tipo de trabajo para el que sean utilizados, aun permaneciendo en contacto continuo con el agua.
• Fuertes: otra propiedad indiscutible de esta clase de tubos es la robustez a la hora de soportar condiciones extremas provocadas, por ejemplo, por factores climáticos.
• Durables: gracias a las tres características anteriores, los tubos construidos con acero inoxidable suelen tener una vida útil muy prolongada.
• Sustentables: a diferencia de los tubos fabricados con otros materiales, los de acero inoxidable son totalmente reciclables ya que se los puede fundir para realizar piezas nuevas.
• Higiénicos: debido a su singular constitución físico-química, el uso de este tipo de tubos resulta ideal en industrias como la alimenticia, donde la limpieza es un factor crucial.
• Rentables: si bien el acero inoxidable no es un material económico, estos tubos sí lo son teniendo en cuenta su extensa vida útil y bajo costo de mantenimiento.
• Versátiles: gracias a sus múltiples características, estos tubos pueden ser empleados en diferentes funciones, en las más variadas industrias.
• Estéticos: mucho más atractivos que los tubos de hierro, los de acero inoxidable suelen ser perfectos allí donde la apariencia también importa, como es el caso, por ejemplo, de la arquitectura.

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